A menudo he citado al filósofo danés Soren Kierkegaard sobre qué motiva el cambio. Escribió: «Todo cambio está precedido por la crisis». El economista y premio Nobel estadounidense Milton Friedman hizo una observación similar cuando dijo: «Sólo la crisis, real o percibida, produce un cambio real».
En este contexto, me animó ver el anuncio de cambios en las prácticas de gobierno de Wells Fargo & Co. en respuesta a varias crisis relacionadas con su división de préstamos al consumidor. No me detendré en los detalles de los errores del mega banco o las multas reglamentarias resultantes. Basta con decir que los escándalos que envolvieron al segundo banco más grande del mundo (por capitalización de mercado) lo sacudieron hasta su núcleo.
Un informe de estándares comerciales de 103 páginas publicado por Wells Fargo la semana pasada describe los cambios que el banco ha emprendido como resultado de sus errores, e incluyen cambios importantes en su enfoque de auditoría interna.
Uno de los cambios más importantes es la consolidación de su equipo de auditoría de banca al consumo en un grupo centralizado. A raíz de los escándalos, un informe interno mostró que los silos organizacionales habían obstaculizado los esfuerzos para informar las inadecuadas prácticas a través de procesos y estructuras de control establecidos. La consolidación del equipo de auditoría está diseñada para romper esos silos, dijo un portavoz de la compañía a The Wall Street Journal.
El banco también creó nuevos equipos de gobierno a nivel de gestión con la tarea de apoyar el liderazgo en la gestión de riesgos. Cada equipo tiene un conjunto definido de autoridades y responsabilidades. De gran importancia son las políticas que crean «vías de progreso claras y perspectivas de informes de riesgo». Del informe de Wells Fargo:
«La estructura del comité de gobierno corporativo está diseñada para permitir la comprensión, la consideración y la toma de decisiones sobre asuntos importantes de riesgo y control en el nivel adecuado de la empresa y por la combinación adecuada de ejecutivos».
Este paso refleja un fuerte compromiso con la gestión de riesgos que, según el informe del banco, se guiará por cuatro principios básicos: el enfoque en las relaciones a largo plazo, la responsabilidad, la filosofía del riesgo y un ambiente de inclusión y franqueza.
Esa filosofía se aplica al uso de Wells Fargo de su división de auditoría interna. Describió los Servicios de Auditoría de Wells Fargo como «la prestación de servicios de auditoría interna autónoma y objetiva, tales como evaluaciones y un desafío fidedigno con respecto al gobierno, la gestión de riesgos y los controles de la empresa». Es significativo que la descripción incluya las palabras «desafío creíble».
Este concepto ha sido parte de la regulación bancaria durante varios años, pero por lo general se aplica a las juntas directivas, que se espera que cuestionen las acciones, decisiones y recomendaciones de la administración. Es alentador que la auditoría interna en Wells Fargo se encargue de ese mismo trabajo. Además de realizar pruebas y proporcionar evaluación y aseguramiento de la gestión de riesgos, la gobernanza y la estructura de control del banco, la auditoría interna se encarga de asesorar proactivamente a la administración sobre «riesgos, prácticas de administración y controles en el diseño e implementación de nuevos productos comerciales”, «Servicios y procesos; desarrollo de sistemas; cambios operacionales e iniciativas estratégicas».
Otros detalles de las operaciones de auditoría interna, que incluyen el requisito explícito de adherirse a las Normas Internacionales para la Práctica Profesional de la Auditoría Interna y el Código de Ética del IIA, describen un ejemplo de libro de texto de un componente empoderado y respetado del equipo de gestión de riesgos de Wells Fargo. Al menos en el papel, parece que se invita a la auditoría interna, de hecho se espera, a actuar como un asesor confiable para el consejo y la gerencia.
Por supuesto, solo el tiempo dirá si las acciones de Wells Fargo se mantendrán fieles a sus políticas escritas, pero hay indicios de que el banco está comprometido con los cambios. El Wall Street Journal informa que el banco ha aumentado el tamaño de su personal de auditoría en aproximadamente un tercio a 1.350 empleados en los últimos dos años. El banco también agregó directores más experimentados a su comité de riesgo a nivel de directorio.
Estoy convencido de que los cambios emprendidos por Wells Fargo, si son aceptados por la administración y sustentados por la junta directiva, fortalecerán la organización y mejorarán su gestión de riesgos, gobierno y control. Si esto sucede, en última instancia, puede servir como modelo para que otros emulen.
Como siempre, espero sus comentarios.
Declaración
Richard F. Chambers, presidente y director general del Instituto de Auditores Internos Global, escribe un blog semanalmente para InternalAuditor.org., sobre temas y tendencias relevantes para la profesión de la auditoría interna.
